Carla vivía feliz con su hijo Lucas en la gran ciudad ,pero un día la llamo su jefe y la ofreció un ascenso. El puesto incluía una casa en el monte en la que poder vivir. Carla acostumbrada a la ciudad aquellos paisajes le recordaban a su infancia, en el campo ,aunque estaba nerviosa de comenzar su nueva vida en lo alto del Umi. Lucas no paraba de llorar al tener que despedirse de sus amigos. Un día Carla y Lucas discutieron y no se supo nada más de Lucas . Carla estuvosemanas buscando a Lucas. Empezaron a circular hipótesis, leyendas, sobre que había un hombre en el monte que se llevaba a los niños. Un día cuando habían pasado ya varios años Carla estaba sin gasolina ,cuál fue su sorpresa cuando la señora que la atendió en la gasolinera le sonaba. La reconoció como una antigua vecina suya. Le hablo de una panadera y de que había visto a Lucas trabajando con ella. Carla quería verlo por ella misma y se presentó esa misma tarde,la señora no reconoció nunca que ningún joven trabajará allí. Carla se fue decepcionada, no creía nada. Una semana después su instinto le dijo que tenía que volver a la panadería. Allí pilló a Lucas con la manos en la masa literalmentejunto a la vieja del monte, se había estado alimentado de pan. Su corazón latió algún día volvería, pero espero tanto que ya sólo se combirto en una señora trastornada. Nadie creyó jamás que el hijo de la panadera era el hijo de Carla . Lucas no volvió. Algunos dan la razón a Carla ,otros dicen que perdió la cabeza.
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