Tauro

Alejandro supo que quería dirigír una empresa desde los 18 años , y no paro hasta que lo consiguió. Se despertó aquella mañana cogió su cartera, que estaba en sitio de síempre, y dio un beso a su hija, que estaba desayunando, antes de irse a trabajar. No pudo evitar ordenar el desorden que había dejado su hija el día anterior,dibujando.. Siempre le había resultado fácil resolver problemas  , síempre encontraba una solución útil y sencillas sus sueños no tenían límites, y en eso su hija había salido a él con su gran imaginación . A veces pensaba que en la empresa le tenían miedo , luego se le quitaba la paranoia todos sabían que Alejandro era buen jefe y buena persona aunque a veces perdiera los nervios y a más de uno estuviera a punto de tirarles el café encima.